Una tragedia sacudió Trujillo, Perú, tras el colapso del techo del centro comercial Real Plaza. El incidente, ocurrido el viernes 21 de febrero a las 8:45 p.m., dejó un saldo lamentable de seis fallecidos y varios heridos. Intercorp, la empresa propietaria de Real Plaza, emitió un comunicado expresando sus más profundas condolencias a las familias de las víctimas y ofreciendo su total apoyo a los afectados.
Investigación exhaustiva
La empresa enfatizó su compromiso de colaborar estrechamente con las autoridades para esclarecer las causas del derrumbe. Señalaron que Real Plaza Trujillo operará junto a los organismos estatales hasta que se determine la razón del colapso. Intercorp aseguró que no escatimará esfuerzos ni recursos en la investigación, demostrando su determinación en hallar respuestas y prevenir futuros accidentes.
Apoyo a las víctimas y sus familias
Más allá de la investigación, Intercorp recalcó su prioridad en brindar atención inmediata y el apoyo necesario a las familias de los fallecidos y a los heridos. Se comprometieron a cubrir los gastos médicos y ofrecer la asistencia requerida para afrontar esta difícil situación. La magnitud de la tragedia ha conmocionado al país, generando un debate sobre las medidas de seguridad en las construcciones y la necesidad de auditorías rigurosas para prevenir incidentes similares.
Llamado a la transparencia
La transparencia será fundamental en el proceso de investigación. La expectativa de la población es que se realice una investigación exhaustiva e imparcial para determinar las responsabilidades y evitar futuros desastres. Las familias de las víctimas, así como la opinión pública, demandan respuestas claras y acciones contundentes para garantizar la seguridad en los espacios públicos y comerciales. El suceso ha generado interrogantes sobre las normas de construcción, los procesos de inspección y el mantenimiento de infraestructuras de gran envergadura.
Consecuencias y repercusiones
El colapso del techo del Real Plaza no solo ha generado una pérdida irreparable de vidas humanas, sino que también ha dejado una huella profunda en la comunidad. El impacto psicológico en los sobrevivientes y testigos del accidente es significativo, y se requiere de apoyo emocional y psicológico para superar el trauma. Además, el evento ha impactado la economía local, con la interrupción temporal del funcionamiento del centro comercial y las posibles consecuencias para los negocios establecidos en el mismo.
La investigación del colapso del techo del Real Plaza de Trujillo se convierte en un caso emblemático para la seguridad de las construcciones en Perú. El desenlace de la investigación y las medidas que se tomen como consecuencia serán cruciales para establecer precedentes y garantizar la seguridad de la población en lugares de concurrencia masiva.
Fuente: Gestión