
Una noticia sorprendente sacude al sector energético peruano: el Ministerio de Energía y Minas (Minem) podría asumir los costos de mantenimiento del Oleoducto Norperuano, responsabilidad que hasta ahora recaía en Petroperú. Esta decisión, aún en proceso de negociación, implicaría un cambio significativo en la gestión de este activo crítico nacional.
¿Por qué este cambio?
Según el presidente de Petroperú, Alejandro Narváez, las conversaciones con el Minem y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) buscan transferir el presupuesto para el mantenimiento del oleoducto. La razón principal: los altos costos asociados a los constantes ataques al oleoducto. Narváez reportó 104 atentados hasta la fecha, generando pérdidas millonarias para Petroperú.
Un gasto considerable
Mantener operativo los 1,106 kilómetros del Oleoducto Norperuano representa una inversión significativa. Para este año, se han presupuestado 112 millones de dólares solo para labores de mantenimiento. Esta cifra, que no genera ingresos, representa una carga financiera importante para Petroperú, justificando la búsqueda de una alternativa.
El camino hacia la transferencia
La posibilidad de la transferencia del gasto al Minem se encuentra contemplada en un decreto de urgencia de setiembre de 2024. Específicamente, la cláusula 6.3 establece la intención del gobierno de asumir estos costos. Sin embargo, la concreción de esta transferencia aún está pendiente, dependiendo de las negociaciones entre los ministerios involucrados y la aprobación del presupuesto.
Implicaciones para Petroperú
Si el Minem asume los gastos, Petroperú liberaría recursos significativos, mejorando su situación financiera. Esta medida podría tener un impacto positivo en la rentabilidad de la empresa, permitiéndole enfocar sus recursos en otras áreas estratégicas.
¿Qué significa para el futuro del Oleoducto Norperuano?
La transferencia de responsabilidades podría asegurar la continuidad del mantenimiento del oleoducto, crucial para la economía peruana. La inversión en seguridad también podría aumentar, reduciendo la vulnerabilidad del oleoducto a futuros atentados.
El desarrollo de este proceso dependerá en gran medida de la agilidad de las negociaciones interministeriales y la asignación de presupuesto. Se espera que en las próximas semanas se obtengan más detalles sobre la concreción de esta importante decisión para el futuro del Oleoducto Norperuano.
Fuente: Gestión