
En una noticia que sacude el sector energético peruano, CPP Investments, la poderosa administradora de fondos de pensiones de Canadá, ha anunciado la venta de su participación mayoritaria en Transportadora de Gas del Perú (TGP). Esta empresa es clave en el transporte del gas natural de Camisea, un proyecto vital para la generación de energía eléctrica en el país.
CPP Investments, que poseía el 49.87% de TGP, ha concretado un acuerdo con EIG, una firma global especializada en energía e infraestructura, para transferir su participación. Esta decisión marca un cambio significativo en la estructura accionarial de TGP, que hasta ahora contaba con la participación de Sonatrach de Argelia (21.18%) y Enagás de España (18%).
¿Quién es el comprador?
EIG, con más de US$ 23,800 millones en activos bajo gestión, es un peso pesado en el sector energético global. Su experiencia en inversiones privadas a gran escala en energía e infraestructura energética la convierte en un nuevo socio estratégico para TGP. La compañía ha declarado su compromiso de mantener la excelencia operativa y la confiabilidad del servicio de TGP, asegurando que seguirá siendo un pilar fundamental en la infraestructura energética peruana.
Impacto en el mercado energético peruano
La venta de la participación de CPP Investments en TGP genera incertidumbre sobre el futuro del transporte de gas natural en Perú. Aunque EIG ha prometido mantener el funcionamiento óptimo de la infraestructura, la transacción deberá cumplir con los requisitos regulatorios y de cierre habituales antes de concretarse. La magnitud de la inversión de CPP Investments, que asciende a US$ 1,400 millones entre 2014 y 2017, resalta la importancia de este movimiento en el panorama económico nacional. El impacto a largo plazo en los precios del gas y la estabilidad del suministro energético se analizará cuidadosamente en las próximas semanas y meses.
El futuro de TGP
La transacción entre CPP Investments y EIG abre un nuevo capítulo en la historia de TGP. Si bien el acuerdo aún está sujeto a las aprobaciones regulatorias correspondientes, la entrada de EIG promete una nueva era para la empresa. El enfoque de EIG en la eficiencia operativa y la confiabilidad del servicio debe garantizar la continuidad del suministro de gas natural a las regiones del Perú que dependen de esta infraestructura clave.
El anuncio destaca la creciente importancia de las inversiones en infraestructura energética en Latinoamérica y el interés de grandes jugadores internacionales en este mercado dinámico. La transacción también pone de manifiesto la confianza de EIG en la economía peruana y en el potencial del sector energético del país. Queda por verse cómo se desarrollará la integración de EIG en la gestión de TGP y cuáles serán las estrategias a seguir para optimizar el transporte de gas natural en el Perú.
Los términos financieros exactos de la operación se revelarán una vez que se complete el proceso de adquisición. Mientras tanto, el mercado observa con atención la culminación de esta importante transacción que redefine el panorama energético del Perú.
Fuente: Gestión