El Papa Francisco, hospitalizado en el hospital Gemelli de Roma, ha experimentado un grave deterioro en su estado de salud. Según el último parte médico, el pontífice se encuentra en estado crítico tras sufrir una crisis respiratoria asmática prolongada que requirió oxígeno de alto flujo. La situación ha generado una profunda preocupación en el Vaticano y entre millones de católicos en todo el mundo.
El comunicado oficial del Vaticano detalla que el estado del Papa continúa siendo crítico y que, a pesar de los esfuerzos médicos, no está fuera de peligro. Además de la crisis respiratoria, se detectó trombocitopenia (reducción de plaquetas en sangre) asociada a una anemia, lo que obligó a realizar transfusiones de sangre.
Un panorama complicado
A pesar de mantenerse alerta, el Papa Francisco ha pasado el día con más molestias que las experimentadas el día anterior, permaneciendo sentado en un sillón. El pronóstico médico, según el parte, es reservado, lo que subraya la gravedad de la situación. El Dr. Sergio Alfieri, responsable de Cirugía del hospital Gemelli y médico de cabecera del Papa, había declarado previamente que el pontífice no estaba fuera de peligro, aunque no corría peligro de muerte.
La noticia ha generado una ola de oraciones y muestras de apoyo de fieles de todo el mundo. Decenas de personas se congregaron en la plaza del hospital Gemelli para rezar por la salud del Papa, improvisando un altar con flores y velas. Se unieron en oración recitando el rosario en varios idiomas, incluyendo italiano, inglés, español, francés y portugués, pidiendo por su pronta recuperación.
Hospitalización prolongada
Se espera que el Papa Francisco permanezca hospitalizado al menos durante toda la semana siguiente para continuar con el tratamiento de su neumonía bilateral y la infección respiratoria. El proceso de recuperación requerirá tiempo, y los médicos están vigilando de cerca su evolución. El Vaticano ha comunicado que el ángelus del domingo solo se difundirá por escrito para permitir que el Papa descanse.
El Papa, de 88 años, ingresó al hospital la semana pasada por problemas respiratorios inicialmente diagnosticados como bronquitis por infección polimicrobiológica. Posteriormente se confirmó una neumonía bilateral. Los médicos han explicado que la neumonía apareció días después de la infección inicial.
Un futuro incierto
La noticia del agravamiento del estado de salud del Papa Francisco ha generado incertidumbre sobre su futuro y la capacidad para continuar con sus deberes como líder de la Iglesia Católica. La comunidad internacional está a la espera de futuras actualizaciones sobre su evolución. Millones de fieles rezan por su pronta recuperación y un regreso a la salud plena.
Mientras tanto, la situación mantiene en vilo a la comunidad católica mundial, y la atención se centra en las oraciones y el deseo de una pronta recuperación para el Papa Francisco.
Fuente: Gestión.pe