Nuevo Aeropuerto Jorge Chávez: Ositrán revela problemas críticos antes de la inauguración

A pesar de las declaraciones de Lima Airport Partners (LAP) sobre la ausencia de problemas críticos, el Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositrán) ha revelado una serie de observaciones importantes en el nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, que podrían comprometer su seguridad operativa. La inauguración está prevista para finales de marzo, pero Ositrán exige la resolución del 100% de las observaciones antes del inicio de operaciones.

Puntos críticos en la seguridad

Entre las observaciones consideradas «críticas» por Ositrán, destaca el Sistema de detección y alarma contra incendios (DACI). Si bien el sistema existe, Ositrán ha detectado fallos en su integración, lo que podría afectar la evacuación en caso de emergencia. Otras áreas problemáticas incluyen el Sistema de control de accesos (ACS), la Red local de área (LAN), el Sistema de megafonía y alarma pública (PAS/PVAS), y el Sistema de visualización de información de vuelos (FIDS). Además, se requieren reparaciones menores y acabados arquitectónicos, junto con la integración completa en el Centro de Control de Seguridad.

Plazos inciertos y licencias pendientes

La presidenta de Ositrán, Verónica Zambrano, ha afirmado que no hay plazos estimados para subsanar estas observaciones, ya que la complejidad de las soluciones depende del origen de cada falla. Además de los problemas técnicos, existen licencias pendientes de obtener de diversas entidades, como Sedapal y la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), incluyendo licencias de funcionamiento para la playa de estacionamiento y los almacenes. Aunque Zambrano considera que algunas licencias podrían obtenerse en un mes, la situación genera incertidumbre sobre la fecha de apertura.

Más allá de la infraestructura: Operadores y combustible

Ositrán también ha destacado la necesidad de que los operadores de rampa se familiaricen con la nueva infraestructura. Si bien el diseño cumple con las regulaciones, la adaptación a los nuevos sistemas de circulación, mangas y posiciones de estacionamiento es crucial para la seguridad. Otro punto crítico es la planta de hidrocarburos, donde aunque se han realizado pruebas, la autorización final para su uso aún está pendiente. Empresas como EXOLUM, dedicada al transporte y almacenamiento de combustible, también necesitan las licencias correspondientes del Ministerio de Energía y Minas (Minem), con opinión previa de Osinergmin.

Conclusión: Riesgos latentes

La situación plantea un escenario complejo a pocos días de la fecha prevista para la inauguración. Si bien LAP afirmaba inicialmente que no existían problemas significativos, las observaciones de Ositrán revelan la existencia de puntos críticos que requieren una atención urgente para garantizar la seguridad del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez. La decisión final sobre la apertura recaerá en la autoridad aeronáutica, la cual deberá evaluar si se han atendido todas las observaciones críticas antes del 30 de marzo.

Fuente: Gestión