El Congreso peruano se encuentra en la etapa final de la discusión de la Ley de Minería Artesanal y de Pequeña Escala (Ley MAPE), un proyecto que busca reemplazar el Registro Integral de Formalización Minera (REINFO) antes de su vencimiento. Esta ley, que se debatirá el 3 de junio, propone un sistema interoperable y financiamiento preferencial para la minería pequeña escala, marcando un cambio significativo en la formalización minera del país.
Para el exministro de Energía y Minas, Luis Miguel Incháustegui, la propuesta llega demasiado tarde, a pocas semanas del vencimiento del REINFO. Él argumenta que la falta de análisis técnico exhaustivo podría afectar la efectividad de la nueva ley. La premura en la aprobación, según Incháustegui, podría resultar en una legislación deficiente, sin la debida consideración de los aportes de asociaciones y gremios mineros.
Eliminación del REINFO y nuevos desafíos
Si bien la eliminación del REINFO es considerada necesaria, existen aspectos cruciales que requieren mayor precisión. La nueva ley debe abordar temas como las concesiones mineras, los derechos superficiales y los permisos de formalización. Incháustegui destaca la importancia de un debate amplio y técnico, incluyendo las observaciones de los actores involucrados, para asegurar una ley efectiva y justa.
El Sistema Interoperable de la Pequeña Minería (SIPMMA)
La Ley MAPE propone la creación del SIPMMA, una plataforma tecnológica integral para la trazabilidad y fiscalización de la minería de pequeña escala. Esta plataforma integrará, validará y depurará los datos del REINFO, creando un nuevo Registro Nacional de la Pequeña Minería, Minería Artesanal y Minería Tradicional (RENAPMAT). Los inscritos en REINFO serán automáticamente incluidos en el RENAPMAT, siempre y cuando cumplan con los requisitos legales y ambientales.
Trazabilidad y centralización
El SIPMMA permitirá la trazabilidad completa de los minerales, desde su extracción hasta su procesamiento, incluyendo el origen de los insumos y combustible utilizados. La responsabilidad del proceso de formalización se centraliza en el Ministerio de Energía y Minas (MINEM), buscando mejorar la eficiencia y combatir la corrupción que ha afectado la formalización minera a nivel regional.
Acuerdos pendientes entre mineros y concesionarios
Un desafío pendiente es la falta de acuerdos entre mineros artesanales y titulares de concesiones mineras. La formalización requiere acuerdos, pero muchos titulares de concesiones son reticentes debido a posibles pasivos ambientales. Incháustegui propone incentivos y mecanismos para facilitar estos acuerdos, estableciendo la responsabilidad de los mineros artesanales en la remediación ambiental.
En resumen, la Ley MAPE representa un intento de modernizar la formalización minera en Perú, pero su implementación rápida genera preocupaciones sobre la debida diligencia técnica y la inclusión de todos los actores clave. La necesidad de un proceso más participativo y un análisis detallado es esencial para asegurar el éxito de esta importante reforma.
Fuente: Gestión