Este viernes, una serie de redadas migratorias del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en Los Ángeles, California, dejaron a decenas de inmigrantes detenidos. Los operativos, llevados a cabo por agentes armados del ICE, generaron fuertes enfrentamientos con activistas y miembros de la comunidad que intentaron impedir los arrestos. Al menos tres grandes operativos fueron reportados en zonas predominantemente hispanas del centro de la ciudad.
Advertencias por mensaje de texto alertaron a la comunidad sobre la presencia de agentes de inmigración en Los Ángeles. Dos de las redadas se realizaron en negocios del Distrito de la Moda, donde se detuvo a al menos dos docenas de trabajadores, según reportes de activistas que intentaron frenar los operativos. Imágenes aéreas mostraron a un manifestante caer al suelo al intentar evitar que una camioneta de las fuerzas del orden se llevara a los detenidos.
Violencia y tensión
El operativo contó con la participación de agentes vestidos con uniformes camuflados y vehículos blindados. Se utilizaron gases para dispersar a los manifestantes. El FBI confirmó su participación en las redadas, y también se observó la presencia de agentes de la DEA. Ron Góchez, director de Unión del Barrio, describió la situación como “un ataque coordinado armado y terrorista”, debido al terror que busca generar en la comunidad.
Operativos desde la madrugada
Las redadas comenzaron a las siete de la mañana con arrestos de jornaleros que buscaban trabajo en una tienda de materiales de construcción en el área de Westlake. También se reportaron operativos cerca de varias escuelas, lo que obligó a los padres a vigilar las zonas escolares para proteger a los estudiantes. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, expresó su indignación por los operativos, afirmando que no los tolerarán. Sin embargo, la ciudad enfrenta críticas por la supuesta colaboración de la policía local con el ICE, a pesar de las leyes estatales que limitan esta colaboración. El jefe del LAPD negó participación en deportaciones masivas.
Objetivo: 3,000 arrestos diarios
Este operativo es el más grande en Los Ángeles desde la llegada de Donald Trump a la presidencia, quien prometió deportaciones masivas. En las últimas semanas, la administración republicana ha implementado cambios en el ICE para impulsar más arrestos, con un objetivo de al menos 3,000 detenciones diarias. Sin embargo, los arrestos de trabajadores que no representan un riesgo para la comunidad han generado un gran rechazo por parte de la población. Incidente similares ocurrieron en San Diego, donde comensales se enfrentaron con agentes del ICE. La detención de un niño de 9 años con su padre en una corte de inmigración también generó gran controversia.
Una manifestación se convocó para la noche del viernes frente a la cárcel de inmigración en el centro de Los Ángeles. Varios miembros de la comunidad se congregaron en las calles aledañas a las zonas donde ocurrieron los arrestos y se dirigieron hacia la manifestación. Los eventos resaltan la tensión existente entre las autoridades migratorias y la comunidad inmigrante en Los Ángeles.
Fuente: Gestión.pe