
Un impactante colapso de puente en Chancay ha dejado a la nación conmocionada y ha desencadenado una investigación a gran escala por parte del gobierno peruano. El incidente, ocurrido la noche del jueves, resultó en la trágica muerte de dos personas, dejando tras de sí una estela de preguntas y preocupaciones sobre la infraestructura del país.
Responsabilidades bajo la lupa
El presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, se pronunció sobre el suceso, afirmando que se investigará exhaustivamente para determinar las responsabilidades. Si bien no hay constancia de que la concesionaria Norvial hubiera alertado sobre la necesidad de retirar el puente antes del colapso, la antigüedad de la estructura es un factor clave en la investigación.
Adrianzén enfatizó la responsabilidad de Norvial en el mantenimiento del puente, pero aclaró que las pesquisas determinarán si se cumplieron con los protocolos de mantenimiento adecuados. Las investigaciones buscarán establecer la magnitud de la responsabilidad de la concesionaria y si se incumplieron sus obligaciones contractuales.
Consecuencias del colapso
El colapso del puente ha generado un caos significativo en la zona. Los servicios de transporte se han visto gravemente afectados, con desvíos y demoras considerables para los buses que circulan por la ruta norte chica. La comunidad exige respuestas y soluciones urgentes para evitar futuras tragedias.
La investigación, en curso, determinará si se justifica el retiro de la concesión a Norvial, una decisión que dependerá de los términos contractuales. Mientras tanto, el gobierno ha asegurado que se tomarán medidas enérgicas si se comprueba alguna negligencia por parte de la concesionaria.
Llamado a la acción
Este lamentable evento ha puesto de relieve la necesidad de una evaluación exhaustiva de la infraestructura pública del país, asegurando que se cumplan los estándares de seguridad y mantenimiento. La investigación servirá como precedente para mejorar la gestión de proyectos de infraestructura y prevenir incidentes futuros.
Las autoridades se han comprometido a transparentar la investigación y a comunicar los resultados a la población. Se espera que esta tragedia sirva como lección para fortalecer las medidas de prevención y garantizar la seguridad de la infraestructura vial del Perú.
El impacto de este colapso va más allá de las víctimas y el daño material, generando incertidumbre y preocupación por la seguridad de las vías de comunicación del país.
Fuente: Gestión